Gabriel Monteagudo.
De ser acusados de ser un movimiento nazi en 1943 las clases medias de la provincia de Buenos Aires revalorizaron el peronismo a poco de constatar que con él obtenían ventajas sociales. Sin embargo la relación entre el movimiento obrero que caracterizó la Argentina de mitad del siglo 20 nio fue un lecho de rosas.
O no se lo acepta o se lo glorifica. Así ha sido el peronismo desde su nacimiento. Quienes reaccionaron ante el intento del peronismo de ocupar el escenario político, estudiantil, gremial y esparcirse como mancha de aceite sobre toda la sociedad Argentina fueron tildados de gorila durante la rebelión Libertadora de 1955.
Primero no lo quisieron luego sí cuando en su rol de partido gobernante fue un gestor atento a sus reclamos sociales..
Aunque luego se resistieron al proceso de peronización de la administración publica, cuando se vio en el gobierno un peligrosa intencionalidad de controlar la vida asociativa de las organizaciones de la sociedad civil.
Según un estudio aparecido en los últimos días el Segundo Plan Quinquenal del gobierno fue el detonante al plantear la “comunidad organizada”, un paradigma ideal de sociedad donde el estado tutelaría las accione de los individuos y de las organizaciones de la sociedad civil en procura de lograr un equilibrio entre los intereses generales y particulares.
En los primeros años de gobierno de Peron las organizaciones de profesionales mantuvieron una relación armónica con el gobierno bonaerense e incluso algunas de ellas obtuvieron sustanciales mejoras.
Los abogados obtuvieron control de matrícula en 1947, ingenieros y arquitectos obtendrían en esos años beneficios corporativos que los hicieron mirar distinto el movimiento de descamisados.
Sin embargo todo cambió gradualmente en1952 cuando se renuevan las autoridades provinciales.
La ineficacia de los intentos del gobierno peronista por obtener la adhesión de las organizaciones representativas de los profesionales universitarios lo impulso a constituir entidades paralelas a partir de 1953 con la Confederación general de profesionales.
En Bahía Blanca el conflicto explotó a través de las asociaciones de médicos a traves de una disputa laboral en las eleciones de 1946 en una lucha entre la Unión democrática y la coalición de fuerzas peronistas.
Asociaciones de médicos y juristas bahíenses llevaron el conflicto de la adhesión a el odio hacia el peronismo
El informe completo puede verse aquí (ver)
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